Detección de Situaciones

Anómalas (DSA)


Pregunta: Me siento tranquilo/a en mi colegio

Por qué esta pregunta es relevante
Objetivo con una flecha en el centro.

Sentirse tranquilo y seguro en el colegio es un factor clave para que los estudiantes puedan concentrarse en el aprendizaje, participar en clase y socializar de forma saludable.


Un entorno escolar que genera tranquilidad fomenta la confianza, la estabilidad emocional y el sentido de pertenencia.


Además, este indicador es un termómetro indirecto de aspectos como la convivencia, el manejo de conflictos, la seguridad física y emocional y la calidad del clima escolar.

Implicaciones de un resultado bajo
Icono de pulgar hacia abajo negro.

Un puntaje bajo podría indicar que los estudiantes experimentan ansiedad, estrés o inseguridad dentro del colegio.


Esto puede estar asociado a conflictos entre compañeros, problemas de acoso escolar, sobrecarga académica, espacios físicos inseguros o una relación distante con los docentes.


A la larga, puede afectar la asistencia, el rendimiento académico y la salud mental, y aumentar el riesgo de deserción o aislamiento social.

Ventajas al tener un resultado alto
Icono de pulgar hacia arriba negro, que representa aprobación o una respuesta positiva.

Un resultado alto sugiere que el colegio ofrece un ambiente seguro, ordenado y acogedor, donde los estudiantes se sienten respetados, protegidos y emocionalmente estables.


Esto favorece la motivación para aprender, la participación activa en actividades escolares y la construcción de relaciones positivas entre estudiantes y docentes.


También refuerza la imagen institucional como un lugar confiable para las familias.

Recomendaciones prácticas (priorizadas)
Portapapeles con tres elementos marcados.

Prioritarios:


  • Fortalecer las normas de convivencia con participación de estudiantes, docentes y familias, asegurando que sean claras, justas y se apliquen de forma consistente.
  • Prevenir y atender el acoso escolar con protocolos claros, formación de docentes y campañas internas que promuevan el respeto.
  • Crear espacios de escucha activa (tutorías, consejería escolar, buzones de sugerencias) para que los estudiantes puedan expresar sus preocupaciones.


Complementarios:


  • Revisar y mejorar la infraestructura física para que sea segura, iluminada y libre de riesgos.
  • Organizar actividades de integración y bienestar como jornadas deportivas, culturales y de relajación que reduzcan el estrés académico.
  • Formar a los docentes en gestión emocional y clima de aula positivo para que favorezcan la tranquilidad en el día a día.