Sentido Vital en Estudiantes (ESVE)


Pregunta: ¿Creo que no vale la pena esforzarme, porque probablemente las cosas no saldrán bien?

Por qué esta pregunta es relevante
Objetivo con una flecha en el centro.

Este indicador permite medir el nivel de esperanza, motivación y autoeficacia de los estudiantes.


Cuando un alumno siente que no vale la pena esforzarse, se pone en riesgo su rendimiento académico, su bienestar emocional y su capacidad de superación ante la dificultad.


La percepción de que el esfuerzo no lleva a buenos resultados está muy ligada a la desmotivación, la frustración y, en casos extremos, a problemas de abandono escolar.

Implicaciones de un resultado bajo
Icono de pulgar hacia abajo negro.

Un resultado bajo en este indicador significa que muchos alumnos sienten que su esfuerzo no tendrá recompensas.


Esto puede derivar en baja participación en clase, dificultad para mantener hábitos de estudio, incremento en problemas de conducta o apatía y un deterioro en la autoestima.


A largo plazo, los estudiantes pueden desarrollar una visión negativa sobre su futuro académico y personal.

Ventajas al tener un resultado alto
Icono de pulgar hacia arriba negro, que representa aprobación o una respuesta positiva.

Si el colegio obtiene un resultado alto, significa que los alumnos tienen confianza en que sus esfuerzos valen la pena.


Esto genera un círculo virtuoso: mayor persistencia ante los retos, mejor disposición para aprender de los errores, más resiliencia emocional y un mejor clima de aula, ya que los estudiantes contagian motivación entre sí.


Además, los logros académicos suelen mejorar, puesto que la motivación es un motor esencial del aprendizaje.

Recomendaciones prácticas (priorizadas)
Portapapeles con tres elementos marcados.

Prioritarios:


Reforzar la mentalidad de crecimiento:

  • Incluir en las clases ejemplos y dinámicas que muestren que los errores son oportunidades de aprendizaje.
  • Formar a los docentes para que den retroalimentación centrada en el esfuerzo y la estrategia, no solo en el resultado.

Acompañamiento socioemocional:

  • Implementar programas de tutoría o consejería donde los alumnos puedan expresar sus miedos y recibir orientación.
  • Incorporar talleres de habilidades socioemocionales (resiliencia, autoconfianza, gestión de frustración).

Visibilizar logros y avances:

  • Crear espacios para celebrar pequeños logros académicos y personales de los alumnos.
  • Favorecer proyectos donde se vea claramente que el esfuerzo personal o grupal tiene impacto real (ej. ferias de ciencia, proyectos sociales, actividades artísticas).

Conexión con propósito de vida:

  • Diseñar actividades de reflexión vocacional y de sentido de futuro que ayuden a los alumnos a vincular el esfuerzo presente con sus metas personales.
  • Invitar a egresados o personas inspiradoras que cuenten cómo el esfuerzo fue determinante en sus trayectorias.